Receta de torrijas - Recetas con AOVE

Hoy estrenamos un nuevo tipo de publicación en el que iremos viendo riquísimos platos que podrás preparar fácilmente desde casa siguiendo nuestra receta, y en los que, claro que sí, el Aceite de Oliva Virgen Extra Premium Elizondo será un ingrediente fundamental. 

Estando en las fechas que estamos, y para dar así comienzo a esta nueva línea de artículos del blog, ¿qué mejor forma de estreno que hablando del postre más popular y representativo de la Semana Santa?

Sí, hoy vamos a hablar de la famosa en toda España torrija. 

Contaremos algunos detalles muy interesantes de su historia y también, cómo no, de los ingredientes necesarios y los pasos a seguir para su elaboración. ¡Queremos que te quede estupenda!

No importa de qué parte de España seas. Cuando se acerca la Semana Santa vas a ver torrijas por todas partes. En los restaurantes, cafeterías, pastelerías… hasta en casa de tu tía. ¿Pero de dónde viene realmente esta tradición?

Pues no, la verdad es que no sabemos gran cosa del origen y la historia de la torrija, y aún menos de cómo llegó a asociarse con la Cuaresma y la Semana Santa. 

Existen referencias a este postre desde época romana, pero será a partir de los tiempos medievales cuando la torrija comience a asociarse con el cuidado post-parto. Curioso, ¿no? Los hombres de aquella época pensaban que sus ingredientes principales, especialmente la leche y/o el vino, aliviaban antes y después de dar a luz. Durante siglos, aunque no lo creas, las torrijas han permanecido estrechamente ligadas a los dolores del parto. 

¿Y por qué están asociadas a la Cuaresma y la Semana Santa? Pues no hay una respuesta clara. Este plato es el típico postre con un gran aporte calórico, económico, fácil de elaborar y muy socorrido, para tiempos de dificultad. De ahí su popularidad. Su origen, se cree, no tiene nada que ver con la fiesta religiosa. 

¿Te gustaría saber cómo se hacen? Sigue leyendo.

Recetas con AOVE: Torrijas

Ingredientes:

Pasos para hacer torrijas: 

Corta las rebanadas de pan al grosor que prefieras. Te recomendamos alrededor de unos dos centímetros, para que el resultado sea más jugoso. 

Echa la leche, el azúcar, la canela y la piel de limón en un cazo y caliéntalo hasta llevarlo a ebullición. En ese momento, aparta el cazo del fuego y, con su tapa puesta, deja que se enfríe de forma natural. Una vez enfriado, introduce y empapa bien las rebanadas y déjalas en remojo mientras absorbe la leche. Esto suele llevar una hora o dos. 

Batidos los huevos en un plato aparte, iremos pasando cada rebanada de pan, por ambas caras, e iremos friendolas en una sartén amplia, que nos permita maniobrar cómodamente, con abundante Aceite de Oliva Virgen Extra Elizondo n°3 Premium Picual. Ojo, el aceite bien caliente, y las rebanadas bien doraditas por ambas caras. 

¡Y con esto ya tendrías tus torrijas recién hechas! ¡Al sacarlas de la sartén escúrrelas bien! 

Hacer torrijas es muy fácil y cómodo. Ahora bien, como todo en la vida, requiere práctica. Si a la primera no te salen perfectas, ¡verás cómo la segunda vez que las hagas el resultado es mucho mejor! 

 

marzo 26, 2021 — Carlos Mas